jueves, 20 de octubre de 2022

NUESTRO VIAJE O AVENTURA POR LA VIDA

 La confección del árbol genealógico de mi familia o clan Abarca Pereda, fue un deseo innato que apareció en mi corazón cuando tuve uso de razón; posteriormente este deseo fue apoyado por mi madre, porque, efectivamente había una historia que tenía que ser contada desde su ágora que es el mismo ágora de su madre, mi abuela.

Los entendidos dicen que es natural que uno comience a preguntarse por su origen y por muchas cosas más; puesto que de repente, desde el momento de nuestro nacimiento, nos encontramos en un mundo nuevo y extraño, y que tenemos que explorar casi a ciegas..., aprendiendo… con caídas y levantadas…
Así comenzamos a hacer preguntas a nuestros padres, hermanos y demás familiares para reconstruir nuestra propia historia o nuestro origen, para entendernos a nosotros mismos y vislumbrar nuestro destino... Este proceso se llama autorrealización; y el conocimiento del árbol genealógico familiar es una otra herramienta muy importante que puede ayudarnos en este camino; siendo ideal que agreguemos a la historia que viene de la boca de nuestros padres y ancestros: los mapas o cuadros genealógicos y otros documentos, que han de contribuir a una mejor comprensión de los hechos.
La vida, desde su inicio, es acompañada de muchos traumas que vienen con la misma naturaleza de lo que significa nacer, crecer, desarrollarse, evolucionar y alcanzar la última forma o madurez. Debe ser que uno de los traumas más severos que sufre el ser humano es el corte del cordón umbilical de quien le suministra la vida... proceso que ante la necesidad de sobrevivencia, uno tiene que superar físicamente de inmediato, aunque psíquicamente ha de tomarle más tiempo, lo que depende de cada ser.
Cada paso que damos es dejar un mundo viejo por otro nuevo. Dejar el mundo viejo causa dolor, pero el nuevo también está lleno de magia y encanto, precisamente para ayudarnos a superar ese famoso dolor “de la separación de nuestros mundos conocidos y amados”.
Podría decirse, entonces, que la vida es una “constante” de separaciones y abandonos..., nos separamos de nuestra madre al nacer, de nuestra familia al irnos del hogar... “Nos abandonan y abandonamos”... Y también, la vida es una constante de rechazos, humillaciones, traiciones, injusticias… Parece que así está hecho el mundo... y pareciera que son muy pocos los que se libran de tales experiencias desafortunadas.
Pero es una gran ventaja poder tomar conciencia de todo ello para aceptarlo tal como es… y seguir avanzando… sorteando los obstáculos, fluyendo como los ríos, superando esos tránsitos de un viejo mundo a otro nuevo…, con alegría y entusiasmo, con fortaleza y sabiduría, con amor y más amor que nunca… para lograr nuestra última autorrealización.
Hoy en día, se sabe que el conocimiento de nuestro árbol genealógico familiar puede ayudarnos a curar esas heridas del pasado, pues somos el producto de las vivencias de nuestras generaciones ancestrales.
Por lo mismo, hoy… no solo me encontré con mi árbol genealógico familiar cara a cara, sino que también me encontré face to face con una historia más vieja todavía que hay que recordar para tomar conciencia de ella, reflexionar, sentir, aceptar… y sanar…, la de nuestra cultura ancestral Latino Americana.
Sanar nuestra herencia cultural es una tarea que tenemos que hacer cada uno de nosotros sobrevivientes del casi exterminio de nuestra raza, que se efectuó hace más de 500 años; y en la que a nosotras, las mujeres, nos tocó vivir la peor parte, de la que aun hoy, hay secuelas que tenemos que superar; puesto que fuimos doble o triplemente condicionadas por hombres más condicionados todavía… Todos condicionados… Y es eso lo que nos corresponde hacer ahora a nuestra raza indígena: "sanar"…
Sanar hombres y mujeres… no tenemos elección, es nuestra responsabilidad levantarnos y ABANDONAR ESA MENTE TODAVÍA COLONIZADA, por el bien de las generaciones futuras.
Que nuestra libertad y felicidad sea bienvenida en todos los aspectos de nuestra vida.

La contribución del escritor uruguayo, Eduardo Galeano, para nuestra sanación cultural es invaluable. En su honor y recuerdo, comparto su maravilloso legado contribuyendo a su deseo de ser distribuida por tierra, mar y cielo. GRACIAS EDUARDO GALEANO.



¡ELLOS SON LOS ASESINOS!

Caset 03 - Estos indios perezosos no tienen alma... Crónica de un "encuentro" de culturas (minuto 20).





QUINIENTOS ENGAÑOS

Esta es una adaptación de la serie radiofónica "500 AÑOS" cuyos contenidos están basados en el emblemático libro "Las Venas Abiertas de América Latina" de Eduardo Galeano.

Consta de 20 capítulos (ahora en 20 vídeos en YouTube) y hace un recorrido histórico desde la invasión de América por españoles y portugueses hasta el nuevo imperio impuesto por Estados Unidos. Vale la pena escucharlos.



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